Aprender a aplicar el colorete correctamente es más complicado de lo que parece. «Sonríe y aplícalo en las manzanas de tus mejillas», es el consejo común. Incluso con esta indicación aparentemente sencilla, es fácil pasarse de la raya y parecer un poco payaso. Pero hay al menos una buena razón para usar colorete: Ilumina la piel apagada y te da un brillo instantáneo.
Para facilitar las cosas, sigue desplazándote para conocer los seis errores que casi todo el mundo comete al aplicar el colorete.
1: Pensar que es sólo para las mejillas
Cuando pasas mucho tiempo en la industria de la belleza, recoges consejos de los maquilladores. Uno de los mejores trucos de colorete que hemos aprendido es el de la maquilladora de Rosie Huntington-Whiteley, Florrie White, que sugiere que el colorete no es sólo para las mejillas. Además de aplicar sutilmente el color en las manzanas de las mejillas, también debes añadir un poco en las sienes para crear un toque de luz natural, según White. Esto no sólo dará un toque de color a toda la cara (como si se tratara de combinar el color de los accesorios), sino que creará un resplandor general. Incluso puedes espolvorear un poco en el puente de la nariz para conseguir ese aspecto de recién salida de las vacaciones.
2: Elegir el color incorrecto para tu tono de piel
La maquilladora Katey Denno, que trabaja con Amanda Seyfried, Isla Fisher, Mindy Kaling, y más, dice que a la hora de encontrar el tono correcto de colorete para tu tono de piel, «El objetivo es elegir un tono que coincida con el color de tus mejillas cuando tienes un rubor natural.» Entonces, ¿cómo elegir correctamente? Si eres muy pálida, quieres un rosa frío; las pieles oliváceas quieren un tono albaricoque; y para las pieles más oscuras, lo mejor es un colorete superpigmentado. Puedes ver más sobre cómo encontrar el tono adecuado para ti con nuestra guía sobre el color de colorete perfecto para tu cutis.
Aprende los fundamentos del colorete de la mano de la MUA Tobi Henney
Al igual que cuando intentas decidir la fórmula correcta de la base de maquillaje, hay muchos tipos diferentes de colorete que se adaptan a diferentes tipos de piel-desde polvos hasta cremas y tonos suaves.
Entonces, ¿cuál es el adecuado para ti? Para las pieles grasas, la maquilladora Sonia Kashuk recomienda utilizar primero un colorete en crema y después «una ligera capa de colorete en polvo del color correspondiente para fijar el producto y prolongar su duración».
Sin embargo, si tienes la piel más seca, un toque sutil de colorete en crema o incluso un tinte te dará el brillo que buscas. Además, si vas a aplicar el colorete sobre la base de maquillaje, querrás que se difumine con facilidad; las cremas y los líquidos funcionan mejor juntos, mientras que la base de maquillaje en polvo puede aplicarse en capas con un colorete en polvo.
Ten en cuenta que los tintes y los geles deben aplicarse siempre sobre la piel hidratada. Tienden a secarse muy rápido, así que difumina bien y rápido.
#4: Poner demasiado
Sí, sabemos que esto es obvio, pero siempre debes usar menos de lo que necesitas. En caso de duda, quita la mitad de lo que quieras aplicar. Siempre puedes aumentar, pero es mucho más difícil deshacer lo que se ha hecho de más. Si te has pasado con el colorete en polvo, un poco de polvo translúcido encima lo calmará. Otro truco: Aplica el colorete antes de la base de maquillaje para conseguir un aspecto más natural.
#5: No difuminar
El colorete está pensado para imitar el lugar en el que te sonrojarías de forma natural, así que cuando no lo difuminas acabas teniendo un rostro con aspecto de rayas. ¿La solución? Unas buenas brochas de maquillaje. Lee nuestra guía sobre las siete brochas de maquillaje que toda mujer debería tener para ayudarte a decidir cuál es la más adecuada para ti.
#6: No tener en cuenta la forma de tu cara
Al aplicar el colorete, la forma de tu cara es importante. Las personas con rostros alargados son las que más se benefician de aplicar el colorete en las manzanas de las mejillas y luego difuminarlo hacia la línea del cabello. El sombreado en forma de C es el secreto del maquillador para aplicar el colorete en rostros redondos o cuadrados: Aplica el colorete en forma de curva desde las sienes hasta los pómulos.
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