En la temporada 1997-98, el tope salarial de la NBA era de aproximadamente 27 millones de dólares. Ningún jugador de los Bulls ganó más de 5 millones de dólares esa temporada, excepto Michael Jordan, que ganó algo más de 33 millones de dólares.
Entonces, ¿cómo es que el salario individual de Jordan superó todo el tope salarial en temporadas consecutivas, desde 1996-97? El talento, por supuesto, y el tiempo.
Al igual que ahora, los equipos podían superar el tope salarial para fichar a sus propios jugadores. A diferencia de ahora, no había contratos máximos ni impuesto de lujo en el convenio colectivo.
Jordan fue agente libre después de una temporada 1995-96 en la que ganó 3,8 millones de dólares en la última temporada de un acuerdo a largo plazo. Jordan firmó entonces un contrato de un año por 30,1 millones de dólares en 1996-97, cuando el tope salarial era de 24,3 millones. Y Jordan firmó un contrato de un año por 33,1 millones de dólares en 1997-98, cuando el tope salarial se situaba en 26,9 millones de dólares.
El contrato de 33,1 millones de dólares de Jordan tenía un valor superior a la media de la nómina de los equipos de la época y representó el salario más alto en una sola temporada en la historia de la liga hasta 2017-18, cuando LeBron James y Stephen Curry lo superaron.
La nómina del equipo de los Bulls, de 61,3 millones de dólares para la temporada 1997-98, fue la más alta de la liga por 7,4 millones de dólares sobre el segundo lugar, los Knicks.
También fue de 32,8 millones de dólares más que la nómina del equipo de los Utah Jazz, la eventual contraparte de los Bulls en las Finales de la NBA de 1998.
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