En el ciclo de refrigeración, hay cinco componentes básicos: el fluido refrigerante; un compresor, que controla el flujo de refrigerante; las bobinas del condensador (en el exterior de la nevera); las bobinas del evaporador (en el interior de la nevera); y algo llamado dispositivo de expansión. Así es como interactúan para enfriar tus alimentos.
Nicole Sforza
Actualizado el 19 de septiembre de 2012
1. El compresor contrae el vapor del refrigerante, elevando su presión, y lo empuja hacia los serpentines del exterior del frigorífico.
2. Cuando el gas caliente de los serpentines se encuentra con la temperatura más fría del aire de la cocina, se convierte en líquido.
3. Ahora en forma líquida a alta presión, el refrigerante se enfría a medida que fluye hacia los serpentines del interior del congelador y del frigorífico.
4. El refrigerante absorbe el calor dentro del frigorífico, enfriando el aire.
5. Por último, el refrigerante se evapora hasta convertirse en gas y vuelve a fluir hacia el compresor, donde el ciclo vuelve a empezar.
2. Cuando el gas caliente de los serpentines se encuentra con la temperatura más fría del aire de la cocina, se convierte en líquido.
3. Ahora en forma líquida a alta presión, el refrigerante se enfría a medida que fluye hacia los serpentines del interior del congelador y del frigorífico.
4. El refrigerante absorbe el calor dentro del frigorífico, enfriando el aire.
5. Por último, el refrigerante se evapora hasta convertirse en gas y vuelve a fluir hacia el compresor, donde el ciclo vuelve a empezar.
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