Clan, grupo de parentesco utilizado como dispositivo de organización en muchas sociedades tradicionales. La pertenencia a un clan se define tradicionalmente en términos de descendencia de un ancestro común. Esta descendencia suele ser unilineal, o derivada sólo a través de la línea masculina (patriclan) o femenina (matriclan). Normalmente, aunque no siempre, los clanes son exógamos, es decir, no se casan: el matrimonio dentro del clan está prohibido y se considera una forma de incesto. Los clanes pueden segmentarse en subclanes o linajes, y los registros genealógicos o los mitos pueden alterarse para incorporar nuevos miembros que no tienen relación biológica con el clan.
Hasta finales del siglo XX, los clanes eran un fenómeno de gran interés para los antropólogos, pero desde entonces han perdido importancia en los análisis de la organización cultural. Desde una perspectiva funcional, los clanes ayudan a unificar a los grupos al cruzar otras formas de organización social, como el asentamiento, los patrones de residencia postmarital o los conjuntos de edades. Los clanes aliados suelen mantener relaciones recíprocas, prestándose apoyo y defensa mutuos y prestando servicios emocional o económicamente gravosos, como los funerales. Algunos clanes expresan su unidad en términos de posesión de un emblema común, que puede representar el ser ancestral o el origen común de los miembros y, como tal, suele ser objeto de reverencia.