- Resolvemos tus dudas sobre las contracciones.
- Además, descubre cuáles son los síntomas de parto que debes conocer para saber cuándo acudir al hospital.
Las contracciones que siente una mujer embarazada son movimientos musculares en el útero que preparan su cuerpo para que nazca el bebé que espera. Durante todo el embarazo, las sentirás sin dolor porque el cuerpo se está preparando para el parto. Por eso, es importante saber si las contracciones son de parto o no. Durante las contracciones la tripa se pone dura, tensa, y segundos después se relaja. Si estás al final del embarazo, toma nota de lo que te vamos a contar para saber si estás de parto o no, aunque normalmente las que anuncian la llegada del bebé van acompañadas de ligeros dolores al principio que aumentarán a medida que también lo haga su frecuencia. Hay cinco señales que te puedes dar alguna pista de que el parto está cerca: tienes el vientre más bajo y el bebé se mueve menos porque ya está colocado para salir; aumentan las contracciones de Braxton-Hicks, las de entrenamiento; has expulsado el tapón mucoso y tienes cambios uterinos que podrá valorar tu ginecólogo.
¿Cuándo debes ir al hospital si tienes contracciones?
Lo mejor es irte cuando llevas una hora con contracciones cada 4 o 5 minutos y que duran 40 segundos. Si fueras antes, el parto podría parecerte muy largo, y si las contracciones aún no son fuertes, pueden mandarte a casa. Éste es un proceso lento que en un primer bebé puede durar unas 12 horas, aunque el tiempo es muy variable.
¿Cuál es la diferencia entre una verdadera contracción y otra falsa?
Las contracciones falsas no aumentan en intensidad ni tampoco en dolor; pueden aparecer durante un par de horas seguidas y a intervalos regulares o irregulares, con un patrón como de 3-8-7-5- minutos, habitualmente de noche. Son una especie de «ensayo general” del útero que sirve para que el cuello se vaya preparando para el parto. Aparecen a partir del sexto mes, pero sobre todo en las últimas semanas.
¿Qué significa que a lo largo del embarazo el vientre se endurezca de vez en cuando?
El vientre se pone duro cuando haces movimientos repentinos, como al agacharte, levantarte rápidamente, al realizar esfuerzos excesivos y cuando estás muy ajetreada, al final del día. También los movimientos del bebé o su propio crecimiento pueden provocar un endurecimiento, pero de manera focal, no total. A veces es algo muy molesto, pero inocuo, y puede darse a partir del cuarto mes. Algunas mujeres los notan a menudo, otras apenas los sienten. Si los tienes en periodos de mucho ajetreo, es señal de que debes tomarte la vida con más calma (en este caso influye el estrés).
¿Cuál es la función de las contracciones durante la dilatación?
Las contracciones van abriendo el cuello uterino poco a poco. Es una fase larga que con el primer bebé puede durar de 8 a 12 horas. El expulsivo dura 1 o 2 horas y el alumbramiento (la salida de la placenta), unos 20 minutos. Este tiempo es una media, ya que cada parto es distinto. En un segundo parto todo el proceso suele ser más rápido.
¿Cada cuánto tiempo se suceden las contracciones de parto?
Las contracciones tienen un inicio, un final y una pausa después, que te permite relajarte y coger fuerzas para la siguiente. Al principio son irregulares y poco frecuentes, pero se hacen más seguidas a medida que avanza el parto: de cada 10 minutos, a cada 6, 4, 3 (trabajo de parto) o 2 minutos (al final de la dilatación).
¿Cuál es la mejor manera de afrontar las contracciones?
La tendencia humana ante el dolor es contener la respiración y contraer los músculos. Pero en el parto debes hacer lo contrario (el dolor es una señal positiva que indica que el nacimiento se acerca): dejarlas venir y respirar al compás de las contracciones.
Así tu cuerpo segrega endorfinas, un tipo de analgésicos naturales que suavizan el dolor. Como las contracciones vienen pausadas y el dolor aumenta poco a poco, tienes tiempo para familiarizarte y entregarte a ellas.
¿Hasta que no se expulse el tapón mucoso no habrá contracciones?
La pérdida del tapón mucoso, una sustancia de aspecto gelatinoso de color oscuro o rosado, puede darse en diferentes momentos.
Por ejemplo, días antes, o bien al principio, a la mitad o incluso al final del parto (si éste es muy rápido). Expulsar el tapón mucoso indica que el parto se acerca, pero puede que tengas que esperar aún algunas horas o algunos días hasta que vengan las contracciones de parto.
¿Por qué a veces las contracciones de parto se detienen?
Se segrega mucha adrenalina, que bloquea la secreción de la oxitocina, la hormona que provoca las contracciones. Esto puede ocurrir cuando estás asustada, te sientes observada o estás tensa; por ejemplo, al entrar en el hospital. La matrona hará todo lo posible para que se reinicien las contracciones, como permitirte una ducha caliente, cambiarte de postura o animarte a pasear por los pasillos. También la intimidad y la privacidad resultan muy importantes. No dudes de tu capacidad de dilatación, ya que la interrupción se debe a factores externos y no personales.