La sabiduría popular y los conocimientos científicos consideraban que una milla por debajo de los cuatro minutos era una barrera insuperable hasta que Sir Roger Bannister estableció el récord mundial de 3min 59,4s en 1954. Desde entonces, se ha establecido un nuevo récord mundial en 18 ocasiones, siendo el actual de 3:43.13 en 1999. En los últimos 100 años se han rebajado en más de 30 segundos los tiempos de la milla más rápida y los límites humanos son constantemente superados por atletas de hiper-élite.
¿Es posible entonces que un humano corra algún día una milla por debajo de los tres minutos? Para entender los límites de esta carrera, primero tenemos que ver la fisiología involucrada en correr la distancia.
La distancia se encuentra en una categoría «ni aquí, ni allá». Es demasiado larga para un sprint total, pero demasiado corta para correrla como una carrera de distancia. Mientras que los corredores de 400 y 800 metros pueden llegar al umbral anaeróbico, los de la milla tienen que controlar su consumo de oxígeno para asegurarse de que les queda suficiente para los últimos cientos de metros. Por otro lado, los corredores de 5.000 y 10.000 metros son capaces de establecerse en un «surco» en el que pueden repartir la energía en dosis muy calibradas; los corredores de la milla se esfuerzan demasiado para encontrarse en un surco.
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Los corredores suelen tener grandes reservas de energía bruta al final de la carrera, pero están a punto de desmayarse por falta de oxígeno. Esta fatiga está causada por un alto índice de metabolismo anaeróbico, que se produce cuando corres demasiado rápido para que tu corazón pueda proporcionar suficiente oxígeno a tus músculos. Exceder tu metabolismo anaeróbico provoca una serie de problemas, como la inhibición de la liberación de calcio, que desencadena la contracción muscular, y la acumulación de otros metabolitos en los músculos, lo que se traduce en una disminución de la producción de fuerza y de la velocidad de carrera.
Aún comprendiendo la extraña naturaleza de la carrera, algún día se conseguirá una milla de tres minutos, ¿verdad?
Una milla es demasiado larga para un sprint total, pero demasiado corta para correr como una carrera de distancia
La ciencia predictiva nos dice lo contrario. Teniendo en cuenta un conjunto de factores basados en los procesos metabólicos de producción de energía, Francois Péronnet y Guy Thibault, de la Universidad de Montreal (Quebec, Canadá), desarrollaron ecuaciones que predicen la potencia media de salida para una serie de pruebas atléticas. Cuando su modelo se comparó con los resultados reales, la diferencia media entre el rendimiento real y el previsto fue inferior al 1%. Aplicando su modelo a la progresión de los récords mundiales, predijeron un «límite superior» de lo que un humano podría correr en el maratón.
Cuando aplicamos el mismo modelo a los corredores de la milla, calculamos que el récord mundial debería bajar a 3:33,29 en 2028 y a 3:29,84 en 2040. Extrapolando a un momento desconocido del futuro y manteniéndonos en la etapa actual de la evolución humana, encontramos que el límite absoluto en la milla es de 3:18,87. Se trata de un «límite superior» más que de una predicción; lo más rápido que podría correr alguien en el estado actual de nuestra especie.
¿Se producirá realmente alguna vez el tiempo de 3:18,87 en la milla? No podemos estar seguros. Sin embargo, ¿una milla por debajo de los tres minutos? Eso es científica y fisiológicamente imposible.
Récords de la historia de la milla por debajo de los cuatro minutos
Roger Bannister – 3:59.4Roger Bannister entrenó específicamente para romper la barrera de los cuatro minutos en 1954 y utilizó a Chris Chataway y Chris Brasher como marcadores de ritmo.
Steve Ovett – 3:48.4Con Steve Ovett y Sebastian Coe en la cúspide de su dominio de la media distancia, intercambiaron tres veces el récord mundial de la milla en agosto de 1981.
Sebastian Coe – 3:47.33Coe, que ya era el primer hombre que ostentaba simultáneamente los récords de 800, 1.500 y milla en 1979, realizó su mejor tiempo en 1981, un récord que cayó en manos de Steve Cram cuatro años después.
Hicham El Guerrouj – 3:43.13El marroquí Hicham El Guerrouj, ampliamente considerado como el mejor mediofondista de todos los tiempos, posee los récords mundiales de los 1.500 metros, la milla y los 2.000 metros al aire libre.