Descubre las diferentes partes del ojo.
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Básicamente, la función del ojo es convertir la luz en señales eléctricas llamadas impulsos nerviosos que el cerebro convierte en imágenes de nuestro entorno. Los rayos de luz pasan a través de la pupila en la córnea.
Humor acuoso: mantiene la presión en el ojo y nutre la córnea y el cristalino aportando aminoácidos y glucosa, así como vitamina C.
Coroides: una fina capa de vasos sanguíneos que nutren la retina y absorben la luz dispersa.
Músculos cilíndricos: un músculo circular que se relaja o se tensa para permitir que el cristalino cambie de forma para enfocar.
Córnea: una cubierta transparente en la parte delantera del ojo que enfoca la luz que entra en el ojo.
Fóvea: una pequeña fosa en la mácula que proporciona la visión central nítida que se necesita para realizar actividades, como leer y conducir.
Iris: la parte coloreada del ojo que regula la cantidad de luz que entra.
Lente: la parte transparente del ojo que se encuentra detrás del iris y que ayuda a enfocar la luz, o una imagen, en la retina.
Mácula: la zona sensible situada en el centro de la retina responsable de lo que se ve por delante (visión central).
Nervio óptico: un haz de más de un millón de fibras nerviosas que transporta los mensajes visuales desde la retina hasta el cerebro.
Pupila: es la abertura en el centro del iris que deja pasar la luz. Está regulada por el iris.
Retina: es el tejido sensible a la luz que se encuentra en la parte posterior del ojo y que convierte la luz en impulsos eléctricos que se envían al cerebro a través del nervio óptico.
Esclerótica: también conocida como el blanco del ojo, es la capa exterior del ojo humano.
Humor vítreo: un gel transparente que rellena el interior del ojo y le ayuda a mantener su forma.
Las lágrimas
Las lágrimas tienen tres componentes principales: un componente acuoso, un componente aceitoso y un moco. Estos crean una película que cubre la parte blanca del ojo y la córnea. Un problema con cualquiera de las tres capas puede causar ojo seco.