Un ecografista médico de diagnóstico podría responder a la pregunta «¿Es un niño o una niña?», así como a una serie de otras preguntas médicas que cambian la vida con la ayuda de la tecnología de los ultrasonidos. Más allá de los bebés, los ecógrafos se utilizan para ayudar a diagnosticar afecciones médicas mediante la creación de imágenes de los órganos y tejidos del cuerpo.
Entre estos profesionales se encuentran los ecografistas musculoesqueléticos, especializados en crear imágenes de músculos, ligamentos, tendones y articulaciones; los ecografistas abdominales, que capturan imágenes de la cavidad abdominal y de órganos cercanos como el riñón, el hígado y el páncreas; y los ecografistas de mama, que capturan imágenes del tejido mamario que podrían confirmar la presencia de quistes y tumores.
Los ecografistas de diagnóstico médico cualificados desempeñan un papel fundamental a la hora de garantizar un diagnóstico adecuado. El trabajo utiliza elementos tanto sociales como técnicos, ya que los ecografistas deben colocar al paciente en la posición correcta para que una máquina correctamente calibrada pueda producir la mejor imagen posible. El trabajo también requiere conocimientos sociales, ya que el ecografista puede ser la primera persona a la que acuden los pacientes nerviosos para obtener información sobre su estado.
Con los avances en la tecnología de la imagen, muchos centros médicos la utilizan en lugar de procedimientos costosos e invasivos. En consecuencia, se realizarán más procedimientos fuera de los hospitales. La Oficina de Estadísticas Laborales proyecta un crecimiento del 16,8 por ciento en el empleo de ecografistas médicos de diagnóstico entre 2019 y 2029. En ese período, se estima que se abrirán 12.500 puestos de trabajo.