El ciervo blanco del Depósito del Ejército de Séneca

por Peter Muller

– Advocacy for Animals se complace en presentar este artículo sobre una inusual población de ciervos blancos en el norte del estado de Nueva York y los esfuerzos de los proteccionistas de animales para fomentar el ecoturismo en torno a ellos. Peter Muller lleva mucho tiempo interesado en la protección de los animales y fue miembro fundador de Wildlife Watch, Inc. y de la Coalición para la Protección de los Gansos Canadienses. También fue cofundador de la League of Humane Voters, un comité de acción política que apoya a los candidatos que se comprometen a promulgar y aplicar leyes de protección de los animales. El Sr. Muller ha escrito numerosos artículos y ha concedido entrevistas sobre temas relacionados con la vida salvaje, y es un ponente habitual en conferencias sobre derechos de los animales.

En 1941 el Ejército de Estados Unidos decidió perentoriamente ubicar un depósito de municiones en el condado de Seneca, en el oeste del estado de Nueva York. Para establecer dicho depósito, el ejército se apoderó de más de 10.000 acres (4.000 hectáreas) de tierras de labranza cerca de Seneca Falls por derecho de expropiación. Durante la Segunda Guerra Mundial, el depósito se utilizó para almacenar, mantener y suministrar munición a las unidades del ejército en todo el mundo. La función exacta del depósito desde la Segunda Guerra Mundial ha sido objeto de muchas especulaciones, la mayoría de las cuales el ejército no ha confirmado ni desmentido. Hasta el día de hoy, se han contado muchas historias locales sobre las andanzas del ejército entre los lagos Seneca y Cayuga durante el periodo comprendido entre 1945 y 2000, pero ninguna puede ser verificada de forma fiable.

Cualquiera que fuera el verdadero propósito de su base, esto es lo que se sabe con certeza: en 1941 el ejército cercó toda la zona con 24 millas (39 km) de vallas de 12 pies (4 metros) de altura, atrapando involuntariamente a una pequeña manada de ciervos de cola blanca (Odocoileus virginianus).
Los ciervos de cola blanca (así como otros animales) tienen un gen recesivo que causa el leucismo. El leucismo es una enfermedad que provoca la ausencia de células capaces de producir pigmento. Esta condición hace que su pelaje sea blanco en lugar del color marrón habitual. No son albinos. En el albinismo las células no producen melanina, mientras que en el leucismo hay un fallo total de pigmentación celular.

En la naturaleza, el gen recesivo que causa el leucismo es raro entre los ciervos; y la posibilidad de que un cervatillo reciba dos genes leucísticos, uno de cada progenitor, lo que provocaría la manifestación de la condición, es aún más rara. Por eso, aunque se sabe que hay ciervos blancos, estos ciervos blancos siempre han suscitado asombro y han sido objeto de leyendas.
El ciervo blanco en la leyenda y el mito
En algunas culturas de todo el mundo -europea, nativa americana y asiática- se han contado historias y mitos sobre ciervos blancos. En la mitología europea, los animales mágicos tienen un aspecto llamativo debido a su forma, color, velocidad y poder sobrenaturales; un atributo frecuente de esos animales es un color blanco antinatural. En la mitología celta, la búsqueda de animales sobrenaturales es un tema común. El ciervo o el ciervo blanco aparecen a menudo en los bosques que rodean la corte del rey Arturo, enviando a los caballeros en aventuras contra dioses y hadas. Una fábula cuenta cómo el rey Arturo llegó al pozo de Sir Pellinore, un lugar mágico, sin su grupo de caza ni su caballo tras perseguir a un ciervo blanco. El ciervo blanco fue también el símbolo heráldico del rey de Inglaterra Ricardo II.
En la mitología húngara, un ciervo blanco llevó a los hermanos Hunor y Magar a establecerse en Escitia y a fundar los pueblos huno y magiar.
En la mitología de los nativos americanos existe la leyenda chickasaw, «El fantasma del ciervo blanco». También hay una leyenda Lenape sobre el ciervo blanco que predice que cuando se ve una pareja de ciervos totalmente blancos juntos, es una señal de que los pueblos indígenas de la Tierra del Amanecer se unirán todos y liderarán el mundo con su sabiduría.
Muchas tribus y pueblos indígenas de todo el mundo tienen mitos similares. Las tribus Séneca, Roanoke, Algonquin, Nanticoke y Pocomoke relatan avistamientos del Gran Ciervo Blanco.
En Kamakura, Japón, el templo Engakuji, fundado en 1282, es la sede de una rama de la escuela de la secta Rinzai del budismo zen. Allí se dice que una manada de ciervos blancos divinos salió de una cueva para escuchar el sermón del fundador del templo el día de su inauguración.
Origen y futuro de la colonia de ciervos blancos del Depósito Séneca
Por muy fascinantes que sean estas leyendas, parece que la manada encerrada en el Depósito Séneca tenía evidentemente más de la cuota normal de genes recesivos leucísticos. Debido a su atrapamiento por el vallado en 1941, el rebaño ha sido endogámico durante casi 70 años. El rasgo se ha manifestado hasta tal punto que hoy en día se calcula que hay entre 200 y 300 ciervos blancos en la manada de unos 700 ejemplares. Muchos de los ciervos pardos de esa manada también son portadores del gen leucístico recesivo, por lo que podrían tener progenie de capa blanca. La manada es de gran interés para los biólogos, para los observadores de la vida salvaje y también para los cazadores de trofeos.
En el año 2000 el ejército decidió desmantelar el depósito y anunció públicamente que entregaría la propiedad al condado de Seneca. Dado que la propiedad había sido tomada por derecho de dominio eminente de los agricultores del condado de Seneca, parecía una decisión justa devolverla a los residentes de esa zona. Al recibir la tierra, la legislatura del condado de Seneca invistió a la Agencia de Desarrollo Industrial (IDA) con la autoridad para determinar cómo utilizar y sacar provecho de esta tierra.
En 2007 una propuesta a la IDA vino de una empresa local llamada Sessler Wrecking. Sessler Wrecking propuso establecer una instalación de caza enlatada en el lugar. En una instalación de caza enlatada, los animales confinados por el vallado pueden ser abatidos por individuos que pagan una elevada cuota para disparar a animales exóticos confinados u otros trofeos a una distancia de entre 2 y 10 metros. Cuando las organizaciones y personas interesadas en un futuro diferente para el terreno y el raro ciervo blanco tuvieron conocimiento de la propuesta, impugnaron la propuesta de Sessler Wrecking. El primer grupo que se opuso a la propuesta fue Wildlife Watch Inc. de New Paltz, N.Y. Pronto se unieron otros y apoyaron sus esfuerzos.
Wildlife Watch Inc. publicó un artículo de opinión en el periódico local, «Reveille Between the Lakes», en el que se proponía que un área de observación de la fauna salvaje en el lugar, en lugar de una instalación de caza enlatada, supondría un beneficio económico mucho mayor para la comunidad.
Compararon diferentes actividades recreativas relacionadas con la fauna salvaje y argumentaron que la observación de la fauna salvaje ha superado el interés por la caza. Sugirieron que las agencias y los funcionarios que están evaluando cómo utilizar mejor su abundancia natural regional de vida silvestre para el bien económico de la comunidad no tienen otra alternativa lógica que optar por la observación de la vida silvestre como la actividad recreativa asociada a la vida silvestre de elección.
Propuestas para el ciervo de Séneca: ventajas económicas del ecoturismo sobre la caza
Si las diferencias entre la observación de la vida silvestre y la caza se evalúan desde la perspectiva de los beneficios financieros, ambientales o públicos, la observación de la vida silvestre supera a la caza en todos los aspectos. Las siguientes estadísticas lo demuestran (todas las cifras citadas proceden de la Encuesta Nacional de Pesca, Caza y Actividades Recreativas Asociadas a la Vida Silvestre de 2006, publicada en julio de 2007):

  • Estadísticas nacionales de EE.UU.:
    En 2006 la observación de la vida silvestre contó con 71 millones de participantes en todo el país, lo que representa el 31% de la población. Estos observadores de la fauna silvestre gastaron 40.500 millones de dólares, de los cuales 7.650 millones se destinaron a comida y alojamiento. El análisis económico muestra que el negocio de la observación de la fauna está creciendo. Compárese con la caza: en 2006, 12,5 millones de personas salieron a cazar en todo el país; esto representa sólo el 5% de la población. Los cazadores gastaron 21.300 millones de dólares, 2.710 millones de ellos en comida y alojamiento. Se considera que el negocio de la caza está en declive.
  • Estadísticas del Estado de Nueva York:
    En 2006 la observación de la fauna salvaje contó con 4 millones de participantes en Nueva York, lo que representa el 23% de la población. Estos observadores de la fauna silvestre gastaron 1.500 millones de dólares, de los cuales 360 millones se destinaron a comida y alojamiento. El análisis económico muestra que el negocio de la observación de la fauna silvestre está creciendo. Compárese con la caza: en 2006, en Nueva York, 513.000 personas fueron a cazar; esto representa sólo el 3% de la población. Los cazadores gastaron 683 millones de dólares, 101 de ellos en comida y alojamiento. Se considera que el negocio de la caza está en declive.
    • Wildlife Watch Inc. señaló además que la observación de la fauna es incompatible con la caza. Las temporadas en las que la vida silvestre y las aves migratorias son de mayor interés tanto para los cazadores como para los observadores de la vida silvestre coinciden. Por una obvia preocupación por su propia seguridad, así como por la aversión a presenciar la destrucción de la fauna que valoran, los observadores de la fauna silvestre son reacios a visitar zonas que están siendo cazadas. La caza tiene el impacto adicional en la observación de la vida silvestre de hacerla más furtiva y por lo tanto más difícil de observar. Como esta tierra es el hogar de una subespecie única y rara de ciervos que puede atraer a muchos más observadores de la fauna que a los cazadores de trofeos, el ciervo blanco debe ser preservado como un recurso financiero, así como por su valor intrínseco.
      ¿Qué pasará con los ciervos?
      En este momento hay varios resultados diferentes pendientes para la disposición de la zona y el futuro del ciervo blanco. El IDA del condado de Seneca, con la concurrencia del Departamento de Conservación Ambiental del Estado de Nueva York (DEC), tomará una decisión, muy probablemente, de una de las siguientes opciones actualmente pendientes:

        1) Sessler Wrecking propuso establecer una instalación de caza enlatada que incluyera directamente a los ciervos blancos como objetivos principales.

      Esa propuesta fue presentada, principalmente debido a la abrumadora oposición popular a la propuesta que surgió a finales de 2007, cuando la IDA decidió celebrar una audiencia pública sobre la propuesta. En la audiencia, 24 de los 25 oradores desaprobaron la propuesta de convertir el Depósito Séneca en un centro de caza en lata. Tras la audiencia, aparecieron en los periódicos locales numerosas cartas y comentarios de residentes locales que se oponían de forma abrumadora a esa propuesta. Aprobar la propuesta de Sessler sería una decisión impopular.
      2) Empire Green Fuels propuso construir una planta de etanol en el lugar. Esto no tendría un impacto directo sobre los ciervos blancos, pero los dejaría expuestos a la caza y a la explotación como fauna habitual.
      Esta propuesta se enfrentará a dificultades, ya que la zona en la que se propone ubicar la instalación está delimitada en gran medida como humedales, y será difícil ubicar una planta de procesamiento de 40 acres (16 hectáreas), tanques de retención y carreteras para el acceso de los camiones cisterna de acuerdo con la normativa del DEC.
      3) Existe la posibilidad de que el DEC del estado de Nueva York quiera hacerse cargo del emplazamiento para gestionar la zona como una reserva especial para el estado de Nueva York.
      El DEC ha mostrado un interés creciente en la zona, y lo más probable es que desempeñe un papel decisivo en el proceso de obtención de permisos, pero no ha mostrado ningún interés en adquirir los terrenos para el estado.
      4) Recientemente el ejército ha mostrado su interés en utilizar el lugar para el entrenamiento de tropas.
      Esto supondría utilizar parte de la zona durante diez períodos de entrenamiento de 21 días en varios intervalos a lo largo del año. La duración del compromiso del condado de permitir el uso de las instalaciones para el entrenamiento del ejército no está clara. Si el compromiso es de tres años o más, lo más probable es que elimine la propuesta de Empire Green Fuels como contendiente, ya que presumiblemente no podría retrasar el inicio de la construcción de sus instalaciones durante tres años o más.
      5) Seneca White Deer, Inc. (una corporación sin ánimo de lucro), propuso un «parque de conservación» que permitiría la caza anual de un número determinado de ciervos blancos anualmente.
      Seneca White Deer, Inc. propone vender «boletos de lotería» a los posibles cazadores de ciervos blancos en varias ferias de armas en todo el país. Cada otoño, durante la temporada de caza mayor, Seneca White Deer, en consulta con el DEC, establecería una cuota de ciervos blancos que podrían ser abatidos. A continuación, se sortearía ese número de billetes de lotería «ganadores». Es difícil ver en qué se diferencia esta propuesta de la de Sessler. En cada caso, un número de ciervos blancos es abatido en una zona vallada por alguien que paga por disparar a los ciervos a corta distancia en un recinto cerrado. El hecho de que el tirador pague directamente una cantidad elevada o que la tasa de tiro se distribuya entre muchos tiradores potenciales a través de una lotería no supone ninguna diferencia en el principio en cuestión.
      6) Wildlife Watch propone desarrollar un parque natural de vida salvaje como una importante atracción turística para la observación de la fauna.
      La principal atracción del parque natural de vida salvaje propuesto es la presencia de la única manada conocida de ciervos blancos de este tamaño en todo el mundo. Además, existe la posibilidad de observar aves y otros mamíferos carismáticos como castores, zorros y coyotes. En primavera anidan en el depósito águilas calvas, águilas pescadoras y aguiluchos norteños. Una instalación de este tipo reportaría muchos más beneficios económicos a la comunidad que el rodaje de un tesoro natural. La intención de Wildlife Watch es utilizar únicamente la inmunocontracepción en caso de que sea necesario reducir el tamaño de la manada de ciervos. No se utilizarán métodos de control letal para mantener las poblaciones de animales salvajes dentro del parque natural.
      Wildlife Watch presentará una propuesta formal al Consejo de Desarrollo Económico del condado de Seneca en enero de 2009.
      -Peter Muller
      Imágenes: Grupo de ciervos blancos; ciervas blancas curiosas; ciervos blancos y marrones; ciervas blancas con cervatillos; ciervos saltando-todos ellos © Leland Brun.

      Para saber más

      • Wildlife Watch, Inc.
      • Artículo de Peter Muller, «¿Qué pasará con los ciervos blancos del Depósito del Ejército de Séneca?», publicado en el número de invierno de 2008 del C.A.S.H. Courier (publicado por el Comité para la Abolición de la Caza Deportiva)
      • Oficina del Censo de los Estados Unidos: Encuesta Nacional de Pesca, Caza y Actividades Recreativas Asociadas a la Vida Silvestre de 2006, informe final de noviembre de 2007 (documento en formato .pdf; requiere Adobe Acrobat Reader)
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