Entendiendo el óxido de etileno
El óxido de etileno es uno de los productos químicos de mayor volumen producidos en el mundo principalmente como intermedio químico, especialmente para la fabricación de anticongelantes, tensioactivos, espesantes y detergentes, disolventes, plásticos y productos químicos orgánicos. La molécula de EtO contiene un anillo de tres miembros muy tenso que lo hace muy reactivo y, por tanto, muy útil para la industria química. Esta alta reactividad también hace del EtO un biocida muy eficaz contra todas las formas de microorganismos, incluidas las esporas bacterianas y los quistes de protozoos. El EtO es uno de los métodos de esterilización a baja temperatura más eficaces y se utiliza para cerca de la mitad de todos los dispositivos médicos producidos en el mundo actualmente. Toda instalación que utilice óxido de etileno debe emplear un sistema de monitorización de gases ChemDAQ para garantizar la seguridad y la salud de sus trabajadores.
No es sorprendente que para un gas esterilizante, el EtO sea potencialmente peligroso para cualquier persona expuesta a él. A corto plazo, el ETO es un irritante, pero más preocupante es el hecho de que el ETO es también un carcinógeno conocido (IARC, NTP, EPA). Los límites de exposición ocupacional de la OSHA (1 ppm PEL) reflejan este peligro y cualquier lugar donde se utilice el ETO debe tener un control continuo. La alta reactividad del EtO también hace que el óxido de etileno sea explosivo, con un límite inferior de explosividad del 3% v/v y un límite superior de explosividad del 100% v/v. En las zonas en las que existe el riesgo de que se produzca una mezcla de gas EtO inflamable, sólo deben utilizarse monitores intrínsecamente seguros y otra tecnología aprobada para ese entorno. Por ejemplo, ChemDAQ ofrece sensores para EtO de 0 a 100 % LEL (3% v/v), niveles de ppm de EtO y oxígeno que son intrínsecamente seguros.
Actividad microbiana: El óxido de etileno ha demostrado ser eficaz como esterilizante contra todas las formas de microorganismos, incluidas las esporas bacterianas y los quistes de protozoos. El EtO es un agente alquilante directo que no requiere activación metabólica, y sus propiedades de inactivación microbiológica son el resultado de la alquilación de los constituyentes celulares de los organismos, como el ácido nucleico y las proteínas funcionales, incluidas las enzimas, lo que conduce a la consiguiente desnaturalización.