Después de que nazca su bebé, su comadrona o su médico pinzarán y cortarán el cordón umbilical. Una vez cortado, una pequeña parte del cordón permanecerá unida al ombligo de tu bebé: tendrá unos dos o tres centímetros de longitud y se conoce como «muñón del cordón».
Durante los siguientes siete a 14 días, el muñón se oscurecerá, se secará, se arrugará y acabará cayendo. Quedará una pequeña herida, que se curará y se convertirá en el ombligo de tu bebé. A continuación, te ofrecemos unos sencillos consejos para el cuidado del muñón umbilical de tu hijo antes de que se caiga y de su ombligo después de la caída del muñón.
Mantén limpio el muñón
- Lávate las manos antes de tocar el muñón del cordón umbilical de tu bebé y antes y después de cambiarle el pañal.
- Limpia el muñón de tu bebé con agua corriente cuando lo bañes o le pases una esponja. No es necesario utilizar ningún jabón, cremas o pomada antiséptica para mantenerlo limpio.
- Asegúrate de que el muñón se seca correctamente después del baño de tu bebé. Sécalo suavemente con una toalla o un paño suave. Dobla los pañales hacia abajo para que el cordón no quede cubierto y deja que se seque al aire si el tiempo no es demasiado frío.
- Si el muñón se mancha de caca o de pis, lávalo con agua limpia, o con jabón según sea necesario. Asegúrate de que lo secas suavemente y deja que se seque al aire.
- No tires del cordón; se caerá solo.
- Simplemente puedes tirar el muñón del cordón a la basura. Siga lavándose las manos antes de tocar la zona del ombligo de su bebé.
- Es normal que el ombligo tenga un aspecto un poco sucio o una mancha roja donde estaba el cordón. También puede oler mal y tener una secreción clara, pegajosa o marrón que puede dejar una mancha en el pañal o la ropa de tu bebé. Esto forma parte del proceso de cicatrización, que puede tardar hasta siete días en curarse por completo. No causa ningún dolor a su bebé.
- Continúe manteniendo la zona del ombligo de su bebé limpia y seca lavándola con agua corriente cuando se bañe y secándola con palmaditas. Sigue doblando el pañal de tu bebé hacia abajo y deja que se seque al aire.
- Si el ombligo tiene algo de exudado, puedes mojar un bastoncillo de algodón con agua tibia para limpiarlo suavemente, asegurándote de que no sangra. Utiliza un bastoncillo de algodón nuevo cada vez que limpies la zona y luego tíralo.
- Si tu bebé presenta fiebre o temperatura alta.
- Si hay enrojecimiento o estrías alrededor del ombligo y está sensible y caliente al tacto.
- Si hay una supuración turbia que no desaparece después de limpiar la zona.
- Telefonea a 13 SALUD (13 43 25 84) y pide hablar con una enfermera de salud infantil.
- Visita tu centro de salud infantil y comunitario local.
¿Qué hago una vez que el muñón del cordón se ha caído?
¿Cuándo debo acudir al médico?
Si tu bebé se queda dormido, no quiere alimentarse como de costumbre o parece no estar bien.
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