IBM, en su totalidad International Business Machines Corporation, principal fabricante estadounidense de ordenadores, con una importante cuota de mercado tanto en Estados Unidos como en el extranjero. Su sede está en Armonk, Nueva York.
Garry Kasparov jugando contra Deep Blue, el ordenador que juega al ajedrez construido por IBM.
Se constituyó en 1911 como Computing-Tabulating-Recording Company en una consolidación de tres empresas más pequeñas que fabricaban tabuladores de tarjetas perforadas y otros productos de oficina. La empresa adoptó su nombre actual en 1924 bajo la dirección de Thomas Watson, un hombre con una considerable habilidad para el marketing que se convirtió en director general en 1914 y se hizo con el control total de la empresa en 1924. Watson convirtió a la empresa, que por aquel entonces se tambaleaba, en el principal fabricante estadounidense de sistemas de tabulación por tarjetas perforadas utilizados por gobiernos y empresas privadas. También desarrolló una fuerza de ventas muy disciplinada y competitiva que adaptaba los sistemas de tabulación de la empresa a las necesidades de cada cliente.
En 1933, IBM compró Electromatic Typewriters, Inc. y se introdujo en el campo de las máquinas de escribir eléctricas, en el que acabó convirtiéndose en líder del sector. Durante la Segunda Guerra Mundial, IBM ayudó a construir varias calculadoras electromecánicas de alta velocidad que fueron las precursoras de los ordenadores electrónicos. Pero la empresa se abstuvo de producir estos sistemas electrónicos de procesamiento de datos hasta que el hijo de Watson, Thomas Watson, Jr. llegó a la presidencia de la compañía en 1952 y patrocinó un impulso total en ese campo. Al entrar en el campo de la informática, el tamaño de IBM le permitió realizar grandes inversiones en desarrollo. Esta capacidad de inversión, sumada a su dominio de las máquinas de cálculo de oficina, su experiencia en marketing y su compromiso de reparar y mantener sus propios equipos, permitió a IBM asumir rápidamente la posición predominante en el mercado estadounidense de ordenadores. En la década de 1960, ya producía el 70% de los ordenadores del mundo y el 80% de los utilizados en Estados Unidos.
La especialidad de IBM eran los ordenadores centrales, es decir, ordenadores caros de mediana y gran escala que podían procesar datos numéricos a gran velocidad. La empresa no entró en el creciente mercado de los ordenadores personales hasta 1981, cuando presentó el IBM Personal Computer. Este producto consiguió una importante cuota de mercado, pero IBM no pudo ejercer su acostumbrado dominio como fabricante de ordenadores personales. Las nuevas tecnologías basadas en chips semiconductores hacían que los ordenadores fueran más pequeños y fáciles de fabricar, lo que permitía a las empresas más pequeñas entrar en el sector y explotar nuevos desarrollos como las estaciones de trabajo, las redes informáticas y los gráficos por ordenador. El enorme tamaño de IBM le impidió responder rápidamente a estos ritmos acelerados de cambio tecnológico, y en la década de 1990 la empresa se redujo considerablemente. En 1995 IBM compró Lotus Development Corporation, un importante fabricante de software.