Una futura mamá puede tener mucho que considerar a la hora de decidir el momento adecuado para dejar de trabajar antes de la llegada del bebé. Hoy en día, hay más mujeres embarazadas que trabajan hasta unos días, o incluso unas horas, antes de ponerse de parto. A menudo, esa decisión se basa en factores económicos, como la duración de la baja por maternidad remunerada.
No existe una respuesta única a la pregunta «¿cuándo debo dejar de trabajar?», pero hay pautas sanitarias que pueden ayudarle a planificar su baja por maternidad. Asegúrese de discutir los factores relacionados con su trabajo y su embarazo con su proveedor de atención médica.
La mayoría de las mujeres pueden soportar físicamente su carga de trabajo habitual hasta aproximadamente las 32 o 34 semanas de embarazo. Alrededor de este mismo tiempo, muchas mujeres también están cambiando su enfoque mental de su trabajo hacia ser una nueva madre, y eso puede afectar a la decisión sobre cuándo dejar de trabajar.
Algunos tipos de trabajo pueden aumentar los riesgos de tener un bebé prematuro, como los trabajos que implican levantar objetos pesados, ruido excesivo o estar de pie durante muchas horas. Hable con su médico sobre la posibilidad de obtener una orden médica para modificar sus tareas laborales. Las mujeres que han tenido un parto prematuro anteriormente también pueden considerar la posibilidad de terminar el trabajo antes.
Independientemente del trabajo que realice, existen algunas señales de advertencia comunes que indican que ha llegado el momento de reconsiderar sus planes de seguir trabajando. Si las noches de insomnio están afectando a su rendimiento en el trabajo, o se preocupa por todos los preparativos del bebé que aún quedan por hacer en casa, puede ser el momento de pensar en dejar de trabajar antes.
Cuando sentarse y estar de pie resulta incómodo, con las piernas y los pies hinchados, dolores de espalda o falta de aliento, puede ser una señal de que necesita reposo en cama. Y si tiene síntomas de parto prematuro, con dolor, calambres o manchado, necesita atención médica inmediata.
Con el enfoque adecuado para manejar las circunstancias laborales especiales y el apoyo de su médico para las condiciones de salud individuales, la mayoría de las mujeres pueden trabajar durante sus embarazos hasta que estén listas para parar o hasta que llegue el bebé sin riesgo para la salud de su hijo.