Por: Jimmy Evans
La comunicación es el tema más crucial en el matrimonio. Es lo más importante que un esposo y una esposa pueden hacer juntos porque la comunicación trasciende todo. Cada causa de estrés en el matrimonio -niños, dinero, sexo, etc.- puede abordarse con una comunicación honesta y abierta.
Así es como se superan los conflictos: Se habla de ellos. Habla del dinero. Habla de sexo. Habla de los temas de crianza. Un estudio demostró que el 86 por ciento de las parejas divorciadas admitieron que tenían problemas de comunicación en sus matrimonios.
La falta de comunicación precede a casi todos los problemas que surgen en un matrimonio, y eso fue definitivamente cierto para Karen y para mí. Fuimos terribles en la comunicación durante los primeros años de nuestro matrimonio. El proceso de aprender a hablar el uno con el otro fue uno de los métodos que Dios utilizó para sanarnos.
A menudo, cuando hablo de comunicación, algunas parejas escuchan esa palabra e inmediatamente piensan en largas y profundas conversaciones sobre cosas íntimas. Por supuesto, ¡ese tipo de conversaciones son maravillosas! Pero vivir ese ideal puede ser estresante. Basta un niño o dos para que una hora de conversación interrumpida parezca un lujo.
Con esto en mente, quiero desafiarte a que pases el día prestando atención a las diferentes formas en que tú y tu cónyuge os habláis. La comunicación no es algo monolítico. Ocurre a lo largo del día en una variedad de niveles.
Aquí hay seis tipos de comunicación en el matrimonio. Notarás que comienzan con una simple interacción y gradualmente se vuelven más íntimas.
1. Información básica
Son las formas cotidianas en que un marido y una mujer se transmiten detalles, como «La cena está lista» o «Mis padres se fueron de vacaciones esta mañana». Aunque obviamente es un tipo de conversación importante, está relacionada sobre todo con los hechos.
2. Asociación
Porque un marido y una mujer son compañeros, comparten necesidades. Comparten responsabilidades, hijos, finanzas y más. Comunicarse sobre estas acciones compartidas es vital. Esto incluye hablar sobre el dinero o la crianza de los hijos. La asociación es fundamental para un matrimonio sano.
3. Resolución de conflictos
Escucho con bastante frecuencia a parejas a las que les gusta presumir de que nunca se pelean. Esto siempre me hace reflexionar, porque incluso los buenos matrimonios tienen conflictos. ¡La gente tiene desacuerdos! No es un gran problema si pelean -siempre y cuando peleen limpiamente. Sean amables. Escuche. Busca la comprensión. El objetivo de su matrimonio no es evitar las peleas sino resolver los conflictos.
Una cosa que he notado es que los hijos de los divorciados tienden a evitar los conflictos cuando son adultos-especialmente dentro de su matrimonio. Les preocupa que vaya a acabar con la relación. La comunicación durante los momentos de conflicto es la manera de asegurar que no lo haga. De hecho, el conflicto a menudo ocurre durante los tiempos de crecimiento.
4. Conexión
Esto es enorme en el matrimonio. En una relación sana, es fácil conectar con el otro. Puedes hacerlo a través del contacto visual, del afecto físico y de las palabras que os decís. Como humanos, estamos diseñados para buscar la conexión.
Un estudio demostró que, durante una comida media, una pareja tendrá 100 puntos de conexión. Debería ser fácil. Pero en los malos matrimonios, incluso esta conexión durante una comida compartida es difícil.
5. Revelación personal
Este es otro tipo de comunicación críticamente importante porque implica compartir verdaderamente con el otro. Le cuentas a tu cónyuge tus sentimientos. Abres tus emociones. Compartes tu opinión sobre algo. Este tipo de comunicación permite a tu cónyuge entrar en tu mundo.
Una de las cosas más saludables que puede hacer una pareja es procesar juntos los sentimientos negativos. Esto puede implicar desahogarse después de un mal día en el trabajo o puede requerir procesar la ira relacionada con la relación. No dejes que la rabia o la frustración se acumulen. Déjalo salir. Comparte lo que te molesta. Comparte lo que ha herido tus sentimientos. En lugar de insistir en ellos, trabájelos con su cónyuge.
6. Comunicación íntima
Son exactamente lo que usted piensa: expresiones de amor, palabras de afecto, susurros de «te quiero». Son declaraciones que nadie más le dirá a tu cónyuge. Estas palabras unen sus corazones y construyen el tipo de cercanía que mantiene un matrimonio fuerte.
Todos estos seis tipos de comunicación son parte de un matrimonio saludable. En una relación creciente y próspera, deberías ser capaz de hacer los seis.
Desgraciadamente, muchas parejas empiezan su matrimonio con fuerza y se comunican en cada uno de estos niveles. Pero al poco tiempo, se encuentran comunicando sólo la información básica. Puede que hablen de los niños o de pagar la próxima factura. Llegan a un punto en el que su comunicación se detiene en la resolución de conflictos y nunca profundiza.
Echa un vistazo a la forma en que tú y tu cónyuge se comunican hoy. Son los últimos tres tipos de comunicación más profundos parte de su matrimonio? ¿Están conectando? ¿Están compartiendo sus pensamientos y emociones más íntimos? ¿Están comunicando sentimientos íntimos y afecto?
Priorice cada tipo de comunicación en su matrimonio. Puede ser un reto, pero tenemos que ser capaces de hablar el uno con el otro en múltiples niveles. Nos enamoramos hablando y la comunicación es la forma de mantenernos enamorados también.