Pregunto: Soy gimnasta a nivel universitario. Mientras hacía un spagat (split) lateral en el aire, me rompí el músculo gracilis de mi isquiotibial. He oído que se trata de una lesión poco común. ¿Qué he hecho mal para sufrir esta lesión? ¿Qué puedo hacer para no tener otra lesión como ésta?
A: Los atletas de todo tipo pueden desarrollar dolor a lo largo de la parte posterior del muslo por una lesión en los isquiotibiales. El músculo isquiotibial se divide en cuatro partes: el semimembranoso, el semitendinoso, el bíceps femoral y el gracilis. Las distensiones en la parte posterior del muslo que afectan al bíceps femoral son las más comunes. El mecanismo de la lesión (cómo se produce) suele producirse al tirar de la pierna hacia el cuerpo (un movimiento llamado aducción) combinado con una flexión completa de la cadera y una rotación interna (hacia dentro). La rodilla de la pierna lesionada está estirada.
Un gimnasta o bailarín de ballet haciendo un split con una pierna doblada (como el spagat – split hacia el lado) podría causar una lesión de este tipo. Los movimientos de alta velocidad como éste aplican suficiente tensión al músculo que ya no puede resistir la fuerza. El resultado es un desgarro en la unión músculo-tendón.
La clave de esta lesión puede estar en la anatomía del músculo, algo con lo que se nace. De los cuatro músculos isquiotibiales, el gracilis es el más delgado. Está intercalado entre otros dos músculos, lo que puede ayudar a protegerlo en la mayoría de las personas.
Se describe como un músculo en forma de tira. Es un músculo largo que cruza dos articulaciones (la cadera y la rodilla), lo que puede ponerlo en desventaja mecánica. La parte del tendón también es larga: llega desde su fijación en la rodilla hasta la mitad de la distancia que recorre hasta la cadera.
Quizás haya una diferencia en la forma, la longitud o la tensión de este músculo que hace que algunos atletas tengan un mayor riesgo de lesión. O puede haber algo en la forma en que está colocado entre los isquiotibiales y los aductores de la cadera (músculos que mueven la pierna hacia el cuerpo) que lo hace vulnerable a los desgarros con este movimiento.
Se necesitan más estudios para examinar más de cerca la causa de esta lesión. Por qué algunas personas que realizan este movimiento no se lesionan y otras sí es un misterio. Del mismo modo, tampoco se sabe por qué se puede hacer el spagat 100 veces sin problemas y luego desgarrar el músculo en el 101º intento.
Por ahora, está claro que se producen desgarros aislados del músculo isquiotibial gracilis. Pueden ser muy dolorosos pero se recuperan en seis semanas. La mayoría de los atletas pueden seguir entrenando durante la fase de recuperación con algunas modificaciones en su rutina de entrenamiento. No es frecuente que se produzcan nuevas lesiones.
Referencia: Carles Pedret, MD, et al. Isolated Tears of the Gracilis Muscle. En The American Journal of Sports Medicine. May 2011. Vol. 39. No. 5. Pp. 1077-1080.