Ahora hay más amenazas para la salud ocular que nunca, con el aumento del tiempo de pantalla y el uso del teléfono y los rayos UV más fuertes, por lo que es aún más vital que se tomen las precauciones adecuadas para proteger su visión y vista cuando se opta por un procedimiento cosmético selectivo como el Botox.
Posibles reacciones alérgicas
Después de inyectar el Botox, los ojos pueden irritarse y secarse mucho, y pueden ponerse bastante inyectados de sangre y rojos
El Botox implica el proceso de inyectar productos químicos en su piel que luego relajarán los músculos faciales. Como con cualquier inyección, existe el riesgo de una reacción alérgica si el cuerpo rechaza las sustancias. Una reacción alérgica en la cara puede ser perjudicial para la visión y la capacidad de ver. Asegúrese de que el profesional que administre el Botox esté cualificado para ello, como un médico específicamente, para minimizar los riesgos asociados a la pérdida de visión debido a una reacción alérgica.
Visión borrosa
Las inyecciones cerca de los ojos son las que más riesgo presentan, y estas zonas se utilizan habitualmente para combatir las patas de gallo y las líneas de las cejas. Después de inyectar el Botox, los ojos pueden irritarse y secarse, y pueden enrojecerse y enrojecerse. Esta irritación puede convertirse en visión borrosa e incapacidad para ver correctamente. Esto puede ser temporal, pero ha habido casos en los que la visión borrosa se prolonga, y en estos casos un médico u óptico debe ser visto inmediatamente.
Párpados caídos
Uno de los efectos secundarios más frecuentes del uso de Botox son los párpados caídos, ya que alrededor del 5% de los pacientes experimentan este síntoma. Esto ocurre porque el fármaco inyectado se ha filtrado fuera del grupo muscular previsto y ha afectado a los párpados. Esto repercute directamente en la visión, y muchos informan de una disminución de la vista debido al mal funcionamiento del párpado. Dado que los efectos del Botox pueden durar entre 3 y 6 meses, los párpados caídos pueden durar el mismo tiempo, impidiendo una visión adecuada durante meses. Esto es extremadamente problemático para una salud ocular y una visión óptimas.
El Botox puede parecer un procedimiento cosmético seguro y atractivo, pero incluso las prácticas no invasivas tienen riesgos. Cuando se trata de una parte tan importante de su salud como la vista, asegúrese de minimizar los riesgos, elija un médico cualificado y practique con precaución.