¿Cómo se utiliza?
Las pruebas de proteína total y albúmina se incluyen de forma rutinaria en los paneles de pruebas que se realizan como parte de un examen de salud, como un panel metabólico completo (CMP), por lo que se utilizan con frecuencia para ayudar a evaluar el estado de salud general de una persona.
Además, dado que la proteína total puede estar baja, aumentada o las proteínas globulinas componentes alteradas con muchas enfermedades y trastornos diferentes, las pruebas de proteína total y albúmina pueden solicitarse en una variedad de entornos para ayudar a diagnosticar enfermedades, para supervisar los cambios en el estado de salud y como una pantalla que puede indicar la necesidad de varias pruebas de seguimiento.
(Para más información sobre las proteínas en la sangre, consulte la sección «¿Qué se analiza?»)
Las mediciones de proteínas totales pueden reflejar el estado nutricional y pueden utilizarse para detectar y ayudar a diagnosticar enfermedades renales o hepáticas, por ejemplo. A veces, las afecciones se detectan con pruebas rutinarias antes de que aparezcan los síntomas. Si la proteína total es anormal, deben realizarse más pruebas para identificar qué proteína específica es anormalmente baja o alta, de modo que pueda hacerse un diagnóstico específico. Algunos ejemplos de pruebas de seguimiento incluyen la electroforesis de proteínas y las inmunoglobulinas cuantitativas.
Algunos laboratorios informan de la proteína total, la albúmina y la proporción calculada de albúmina y globulinas, denominada proporción A/G. La relación A/G se calcula a partir de la proteína total medida, la albúmina medida y la globulina calculada (proteína total – albúmina). Dado que los estados de enfermedad afectan a las cantidades relativas de albúmina y globulina, el cociente A/G puede proporcionar una pista sobre la causa del cambio en los niveles de proteína.
¿Cuándo se solicita?
La prueba de proteína total se solicita con frecuencia como parte de un panel metabólico completo (CMP) cuando un individuo se somete a un examen de salud rutinario. La proteína total también puede solicitarse para obtener información general sobre el estado nutricional de una persona, por ejemplo, cuando alguien ha sufrido una pérdida de peso reciente e inexplicable. Puede solicitarse junto con varias otras pruebas para proporcionar información cuando alguien tiene síntomas que sugieren un trastorno hepático, renal o de la médula ósea, o para investigar la causa de una acumulación anormal de líquido en los tejidos (edema).
¿Qué significa el resultado de la prueba?
Los resultados de una prueba de proteínas totales suelen considerarse junto con los de otras pruebas del PCM y darán al profesional sanitario información sobre el estado de salud general de una persona en lo que respecta a la nutrición y/o a las afecciones que afectan a los órganos principales, como el riñón y el hígado. Sin embargo, si los resultados son anormales, suelen ser necesarias más pruebas para ayudar a diagnosticar la enfermedad que afecta a los niveles de proteínas en la sangre.
- Un nivel bajo de proteínas totales puede sugerir un trastorno hepático, un trastorno renal o un trastorno en el que las proteínas no se digieren o absorben correctamente. Los niveles bajos pueden observarse en la desnutrición grave y en las afecciones que provocan malabsorción, como la enfermedad celíaca o la enfermedad inflamatoria intestinal (EII).
- Un nivel alto de proteínas totales puede observarse en la inflamación crónica o en infecciones como la hepatitis vírica o el VIH. También puede asociarse a trastornos de la médula ósea, como el mieloma múltiple.
- Una relación A/G baja puede reflejar una sobreproducción de globulinas, como la que se observa en el mieloma múltiple o en las enfermedades autoinmunes, o una infraproducción de albúmina, como puede ocurrir con la cirrosis, o una pérdida selectiva de albúmina de la circulación, como puede ocurrir con la enfermedad renal (síndrome nefrótico).
- Una relación A/G elevada sugiere una subproducción de inmunoglobulinas, como puede observarse en algunas deficiencias genéticas y en algunas leucemias.
- Con una proteína total baja que se debe a la expansión del plasma (dilución de la sangre), la relación A/G será típicamente normal porque tanto la albúmina como la globulina se diluirán en la misma medida.
Después de un resultado anormal de la proteína total y dependiendo de la causa sospechada, se suelen realizar pruebas más específicas para hacer un diagnóstico preciso. Algunos ejemplos son las pruebas de enzimas hepáticas, el panel renal, la electroforesis de proteínas séricas o las pruebas de enfermedad celíaca o EII.
¿Hay algo más que deba saber?
La aplicación prolongada de un torniquete durante la extracción de sangre puede dar lugar a una muestra de sangre con una proteína total falsamente elevada (mayor que la concentración real en la circulación).
Los fármacos que pueden disminuir los niveles de proteínas incluyen los estrógenos y los anticonceptivos orales.
¿Una dieta alta en proteínas aumentará mi nivel de proteínas totales?
No, el aumento de la ingesta de proteínas no aumentará el resultado de su prueba de proteínas totales.
¿Qué tipo de nutrición se recomienda para obtener unos niveles óptimos de proteínas?
Una dieta bien equilibrada que siga las recomendaciones del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos se resume en el USDA Choose My Plate.
¿Qué son las proteínas globulinas y cómo se miden en la sangre?
Las globulinas son todas las proteínas de la sangre distintas de la albúmina, y este grupo está compuesto por cientos de tipos diferentes. Estas proteínas son más grandes que la albúmina y se dividen en alfa, beta y gamma globulinas.
Para cuantificar los diferentes grupos de proteínas globulinas se puede utilizar una prueba de electroforesis de proteínas (véase el artículo sobre Electroforesis de proteínas y la tabla sobre Grupos de proteínas). Una prueba de electroforesis de inmunofijación puede medir los diferentes tipos de inmunoglobulinas (por ejemplo, IgG, IgM, IgA) al igual que una prueba cuantitativa de inmunoglobulinas.
Algunas proteínas de globulina pueden medirse directamente utilizando pruebas específicas para la proteína de interés. Las pruebas son más valiosas en los casos en que una proteína específica está asociada a una enfermedad o condición. Las pruebas de proteínas específicas pueden solicitarse para proporcionar información al profesional sanitario cuando se presentan signos y síntomas particulares que sugieren una de estas enfermedades o afecciones. Algunos ejemplos de proteínas asociadas con afecciones específicas son la proteína C reactiva (inflamación), el fibrinógeno (trastornos de la coagulación), la ferritina (deficiencia de hierro) y la ceruloplasmina (enfermedad de Wilson).
¿Se pueden medir las proteínas en otras muestras además de la sangre?
Sí, se puede realizar un análisis de proteínas en muchos tipos diferentes de fluidos corporales. La finalidad de la prueba y el significado de los resultados varían. Para obtener más detalles, consulte el artículo sobre Análisis de fluidos corporales y seleccione el enlace correspondiente al fluido de interés.