Alternativamente denominada velocidad de reloj y velocidad del procesador, la velocidad de reloj es la velocidad a la que el microprocesador ejecuta cada instrucción o cada vibración del reloj. La CPU requiere un número fijo de ticks de reloj, o ciclos, para ejecutar cada instrucción.
Cuanto mayor sea la frecuencia del reloj de la CPU, más operaciones lógicas podrá realizar por segundo. Así, a medida que aumenta la frecuencia del reloj de la CPU, disminuye el tiempo necesario para realizar las tareas.
La velocidad del reloj se mide en MHz, 1 MHz representa 1 millón de ciclos por segundo, o en GHz, 1 GHz representa 1 mil millones de ciclos por segundo. Cuanto mayor sea la velocidad de la CPU, mejor será el rendimiento de un ordenador, en sentido general. Otros componentes como la memoria RAM, el disco duro, la placa base y el número de núcleos del procesador (por ejemplo, de doble núcleo o de cuatro núcleos) también pueden mejorar la velocidad del ordenador.
La velocidad de la CPU determina cuántos cálculos puede realizar en un segundo de tiempo. Cuanto mayor sea la velocidad, más cálculos podrá realizar, con lo que el ordenador será más rápido. Aunque existen varias marcas de procesadores de ordenador, como Intel y AMD, todas ellas utilizan el mismo estándar de velocidad de la CPU, para determinar a qué velocidad funciona cada uno de sus procesadores. Si un procesador tiene dos o cuatro núcleos, el rendimiento del ordenador puede aumentar aunque la velocidad de la CPU siga siendo la misma. Un procesador de doble núcleo a 3,0 GHz sería capaz de realizar el doble de cálculos que un procesador de un solo núcleo a 3,10 GHz.
Términos de reloj, CPU, GHz, MHz