Los océanos constituyen alrededor del 70 por ciento de nuestro planeta, por lo que es natural que los tesoros ocultos holísticos vivan más allá de la costa. Las algas, por ejemplo, absorben los nutrientes del fondo marino, lo que hace que este vegetal marino esté repleto de más nutrientes y vitaminas que las frutas y verduras cultivadas en tierra firme.
Últimamente, hemos notado que este improbable superalimento aparece en todas partes: en nuestras bebidas, comidas e incluso en el cuidado de nuestra piel. Este aperitivo salado es muy popular en las dietas basadas en plantas, ya que es una fuente vegana única de aminoácidos esenciales. Además, las algas son una fuente de alimento abundante y negativa en carbono (lo que significa que no requiere agua ni fertilizantes para su recolección), por lo que son ideales para los consumidores con conciencia ecológica. Si todavía no estás convencido de añadir algas a algo más que a tus rollos de sushi, sigue leyendo para conocer sus potentes beneficios, además de formas fáciles de incorporar a tu rutina diaria.
La forma comestible de las algas tiene un alto contenido en fibra, lo que es estupendo para promover la saciedad, reducir la hinchazón y facilitar la digestión. «Las algas contienen fibra soluble e insoluble, lo que hace que las algas sean una gran fuente prebiótica para apoyar la salud intestinal», explica la dietista Chelsea Gloeckner, MS, RD.
«Estas fibras incluyen azúcares particulares llamados polisacáridos sulfatados, que se ha demostrado que aumentan el crecimiento de las bacterias intestinales ‘buenas’ y también aumentan la producción de ácidos grasos de cadena corta (SCFA), que proporcionan apoyo y nutrición a la línea celular del tracto gastrointestinal», añade la dietista Rachel Fine MS, RD, CSSD, CDN .
Consejo: Gloeckner sugiere añadir tiras de algas a sus sopas y ensaladas favoritas.
La maravilla submarina contiene muchos minerales y vitaminas que refuerzan el sistema inmunitario. «Las algas son una fuente de potentes antioxidantes, como el alginato y la fucoxantina», dice Fine. «Hay investigaciones prometedoras que muestran posibles beneficios antiinflamatorios que pueden relacionarse con la reducción del riesgo de diabetes y obesidad».
Gracias al yodo y a un aminoácido llamado tirosina, la «hierba» del mar también beneficia a la tiroides y puede ayudar a prevenir enfermedades tiroideas. Las algas también contienen polifenoles, «que pueden apoyar los procesos anticancerígenos en el cuerpo», añade el experto en medicina funcional Dr. Elroy Vojdani, MD.
Consejo: El aperitivo salado es más denso en nutrientes que las galletas y tiene menos carbohidratos, explica la dietista Mónica Auslander Moreno, MS, RD. Ella sugiere tostarlo con aceite de oliva o de aguacate (y evitar emparejarlo con alimentos que tengan químicos artificiales o edulcorantes).
Consejo: Considera cocinar con aceite de algas, en lugar del tradicional aceite de oliva virgen extra, para saltear tus verduras favoritas. Puntos extra por espolvorear el condimento de algas en tu comida preferida.
Además, deja que los beneficios de las algas se te suban a la cabeza: Los expertos, entre los que se encuentran Vojdani y Montemayor, coinciden en que los ácidos grasos omega-3, EPA y DHA que se encuentran en las algas son excelentes para la salud cognitiva, lo que puede incluir una mejora de la memoria y el rendimiento. Algunas poblaciones también confían en este alimento para el desarrollo cerebral de los niños.
Consejo: Cambia tu pasta habitual por fideos de algas, que son una alternativa sin gluten y rica en fibra, baja en carbohidratos.
«La rica vitamina C de las algas proporciona el beneficio de belleza añadido de apoyar la producción de colágeno, y la niacina natural es genial para la hiperpigmentación y las manchas». Otra nutricionista holística aprobada por las celebrities, Sally Pansing Kravich, está de acuerdo y añade: «La clorela es un alga limpiadora que resulta útil para eliminar toxinas, metales pesados y radiaciones».
Consejo: «Podemos envolvernos en algas para nutrir nuestra piel y eliminar toxinas, o ingerirlas para obtener los mismos beneficios», recomienda Kravich.
El hierro y el calcio que contienen las algas favorecen los huesos, mientras que los ácidos grasos omega-3 son beneficiosos para las articulaciones.
Consejo: «El agar es una forma de alga que es un buen sustituto para hacer gelatina y un sustituto vegano del caldo de huesos», señala Kravich.
Al igual que las zanahorias (¡y los aguacates!), las algas pueden ayudar a la visión. «Aunque las algas son bajas en grasa, suelen contener pequeñas cantidades de ácidos grasos esenciales omega-3», explica Ysabel Montemayor, dietista principal de Fresh n’ Lean. «Este es un tipo de grasa que muchos de nosotros no consumimos lo suficiente y es bueno para la salud de los ojos». Además, las algas contienen astaxantina, un poderoso nutriente que protege la vista.
Consejo: Prueba a añadir espirulina a tu zumo, batido o yogur. «Este tipo de alga contiene todos los aminoácidos esenciales y está de moda como complemento de bebidas como la kombucha», apunta Montemayor.