Aunque son lo suficientemente dulces como para usarlas en el postre (como un sensacional pastel de terciopelo rojo teñido de forma natural), las remolachas terrosas son fantásticas en platos salados, especialmente cuando incluyen un buen golpe de vinagre ácido o queso de cabra.
Aunque son lo suficientemente dulces como para usarlas en el postre (como un sensacional pastel de terciopelo rojo teñido de forma natural), las remolachas terrosas son fantásticas en platos salados, especialmente cuando incluyen un buen golpe de vinagre ácido o queso de cabra. Aquí hay 15 maneras de usarlas que van más allá de añadirlas a una ensalada.
1. Trituradas. Para que las remolachas queden crujientes por fuera y súper tiernas por dentro, cocínalas al vapor enteras, luego tritúralas hasta aplastarlas y dóralas con mantequilla y aceite de oliva.
2. En escabeche. Con huevos, o sin ellos, las remolachas en escabeche son el aperitivo más saludable.
3. Sándwiches. Corta en rodajas las remolachas cocidas y colócalas en panecillos con queso de cabra o crème fraîche de rábano picante. O utilícelas en un Reuben vegetariano.
4. Asado a la sal. Para crear remolachas perfectamente sazonadas e increíblemente sabrosas, entiérralas en sal y luego ásalas.
5. Risotto. Tiñe de magenta el cremoso plato de arroz añadiendo remolacha rallada poco antes de servirlo.
6. Sopa de tomate. Prepara una sopa más ligera que haga un guiño a la sopa de remolacha combinando remolachas y tomates y haciendo un puré con caldo.
7. Latkes. Desmenuza la remolacha junto con las patatas para hacer una versión (un poco) más sana de la tortita salada frita.
8. Salteado de soja. Brasea las remolachas en un caldo condimentado con salsa de soja y vinagre para servir como un acompañamiento increíblemente sabroso.
9. Gnocchi. Haz un puré de remolacha para utilizarlo en estas deliciosas albóndigas de tierra.
10. «Tartar». Raya remolacha roja cocida y cúbrela con los ingredientes clásicos del tartar de carne, como alcaparras y cebollas.
11. Ensalada. Desmenuza las remolachas y sírvelas crudas con un aliño cítrico.
12. Brochetas. Pincha las remolachas cocidas y termínalas en la parrilla para que queden bien ahumadas.
13. Dip. Para un hummus con menos calorías, utiliza remolacha cocida en lugar de garbanzos. O haz un puré de remolacha con crema agria y cebolla y sírvelo con verduras blancas crujientes.
14. Salsa. Asa las remolachas cocidas hasta que estén carbonizadas, luego pícalas y mézclalas con ajo, chiles y cilantro; sírvelas con chips de tortilla.
15. Tarta de terciopelo rojo. Tiñe este clásico pastel de cacao de forma natural añadiendo puré de remolacha.
Kristin Donnelly es una antigua editora de Food & Wine y cofundadora de Stewart & Claire, una línea de bálsamos labiales totalmente naturales fabricados en Brooklyn.
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