¿Qué son los quistes ováricos y las masas pélvicas

En algunos casos, la observación puede ser todo lo que se necesita, especialmente para los quistes pequeños y funcionales que no causan síntomas. Para las mujeres que requieren la extirpación de quistes ováricos o la extirpación de los ovarios, incluidas las mujeres que buscan una ooforectomía profiláctica para reducir el riesgo de cáncer en el futuro, la cirugía laparoscópica avanzada ofrece soluciones rápidas y una recuperación casi indolora.

Opciones de tratamiento quirúrgico

Los quistes ováricos benignos (no cancerosos) suelen poder extirparse con laparoscopia, conservando el ovario. En el caso de masas extremadamente grandes o endometriomas, puede ser necesario extirpar todo el ovario y las trompas de Falopio. En el Center for Innovative GYN Care® (CIGC®), a las pacientes con quistes ováricos muy grandes a menudo se les puede extirpar el quiste sólo por laparoscopia, conservando el ovario. Este tipo de cirugía es muy avanzada y normalmente no la realizan los ginecólogos. Las pacientes que desean la fertilidad con endometriomas grandes a menudo se beneficiarán de este tipo de procedimiento, ya que se puede preservar el ovario.

Las pacientes que buscan la prevención del cáncer debido a un aumento de los factores de riesgo genético también requerirán la extirpación completa de los ovarios y las trompas de Falopio.

La decisión de extirpar un ovario se basa en la edad de la paciente, la probabilidad de cáncer y la seguridad del procedimiento. Todas las pacientes recibirán asesoramiento preoperatorio para asegurarse de que comprenden las opciones de conservación o extirpación de los ovarios. Se hace todo lo posible para preservar los ovarios de las pacientes que desean la fertilidad. Sin embargo, las pacientes con sospecha de cáncer, con antecedentes familiares o personales de cáncer de mama o de ovario, o con antecedentes de dolor o cicatrización ovárica pueden necesitar la extirpación completa del ovario en el momento de la cirugía.

Las pacientes premenopáusicas, o que todavía producen estrógenos, experimentarán una menopausia prematura si se extirpan ambos ovarios. En muchos casos, a menos que exista un riesgo genético de cáncer de ovario o signos de cáncer existente, los ovarios pueden conservarse. Hable largo y tendido con su especialista en ginecología sobre sus objetivos a largo plazo y sobre cómo la terapia hormonal puede desempeñar un papel en el manejo de los síntomas de la menopausia, especialmente en la transición y en las primeras etapas.

Procedimiento quirúrgico

Típicamente, para una cistectomía o una ooforectomía son necesarias una o dos incisiones diminutas (1/4 de pulgada) y una incisión ligeramente mayor (3/4 de pulgada). Las incisiones más pequeñas se sitúan en el ombligo y en el extremo derecho o izquierdo de la línea del bikini. La incisión más grande se sitúa justo encima del hueso púbico. La extirpación del quiste ovárico o de todo el ovario no difiere quirúrgicamente en cuanto a tiempo quirúrgico, incisiones, recuperación o cualquier otra medida. La única diferencia es si se deja el tejido ovárico en su lugar.

Los quistes se extirpan quirúrgicamente del ovario utilizando un tipo único de equipo quirúrgico: el bisturí armónico. Este aparato utiliza ondas de sonido para cortar el tejido y sellar los vasos al mismo tiempo. Existe el riesgo de que un quiste ovárico se rompa al realizar la cistectomía. En los casos benignos, o no malignos, esto no es preocupante. Los quistes o masas ováricas sospechosas de ser cancerosas pueden requerir la extirpación completa del ovario para evitar su ruptura. Aunque no supone un peligro inmediato, si las masas cancerosas se rompen, las pacientes necesitarán quimioterapia debido al derrame de células cancerosas en la pelvis.

Para extraer el quiste o el ovario del cuerpo de forma segura, se utiliza una bolsa especial para encapsular el ovario. Esto permite una fácil extracción y evita que el líquido de la masa se derrame en la cavidad pélvica. Toda masa sospechosa de ser maligna se envía para su análisis por sección congelada. En el análisis de la sección congelada, la masa se envía al patólogo mientras la paciente sigue dormida en la mesa del quirófano. El patólogo revisa cuidadosamente las secciones de la masa para descartar el cáncer.

Ventajas del tratamiento laparoscópico

Dado que la gran mayoría de los quistes y masas ováricas en pacientes premenopáusicas son benignas, la laparoscopia es una gran opción para muchas pacientes. Los procedimientos mínimamente invasivos permiten a las pacientes evitar grandes incisiones abiertas para la extirpación de sus quistes, disminuyendo así las estancias en el hospital, los tiempos de recuperación y el dolor. Además, las pacientes posmenopáusicas con masas suelen ser benignas, y las tasas de cáncer oscilan entre el cinco y el 20 por ciento de todas las masas, según el estudio citado. La laparoscopia es un beneficio significativo también para estas pacientes, ya que evitará una cirugía abierta, y la recuperación de la cirugía abierta puede ser cada vez más difícil para las mujeres mayores.

Las mujeres que se someten a una cistectomía u ooforectomía laparoscópica casi siempre reciben el alta del hospital el mismo día, con un excelente control del dolor y una rápida recuperación. La mayoría de las pacientes se reincorporan al trabajo en siete días.

Masasas ováricas y cáncer

Si se identifica un cáncer, se realiza una operación de estadificación durante la misma cirugía. La estadificación supone evaluar otras zonas, como los ganglios linfáticos, para descartar metástasis, o diseminación de la enfermedad, que pueden requerir quimioterapia. La estadificación laparoscópica es más difícil de realizar que el procedimiento abierto, pero permite a los pacientes recuperarse mucho más rápidamente. Los pacientes con cáncer que se someten a este procedimiento se sienten mejor, son más fuertes y pueden empezar la quimioterapia más rápidamente con mejores resultados al evitar una recuperación de dos meses. Ocasionalmente, un paciente con una malignidad más extensa requerirá una cirugía abierta para la extirpación completa de las masas malignas, según se indique.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *