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Encuestas recientes indican que la mayoría de las personas prefieren «envejecer en su lugar» -permanecer en su propia casa mientras envejecen- en lugar de mudarse a una comunidad de jubilados. Esto no es sorprendente; después de todo, «el hogar es donde está el corazón»

En la superficie, permanecer en su casa puede parecer más rentable que mudarse a una comunidad de jubilados. Pero si se profundiza y se hacen las cuentas, los números a veces cuentan una historia diferente.

Aquí hay un ejemplo:

Supongamos que su presupuesto mensual en la jubilación es de 4.000 dólares, de los cuales 3.000 representan los gastos típicos no discrecionales, como los servicios públicos, el seguro de la vivienda, las cuotas de la Asociación de Propietarios, los servicios de césped, los sistemas de seguridad, así como las reparaciones y el mantenimiento continuos de la casa. Supongamos también que una comunidad de jubilados cercana ofrece una atractiva villa por una cuota de entrada de 175.000 dólares y una cuota mensual de 2.200 dólares. La comunidad de jubilados ofrece una serie de servicios y comodidades para una vida independiente, así como acceso a una serie de cuidados en caso de que usted o su cónyuge necesiten servicios de atención a largo plazo.

A primera vista, puede pensar que el traslado a la villa aumentará sus gastos mensuales en 2.200 dólares al mes, lo que supone un total de 6.200 dólares, sin mencionar la cuota de entrada. Sin embargo, resulta que la cuota mensual de servicio cubre aproximadamente la mitad de sus gastos mensuales no discrecionales. Por lo tanto, el aumento real de su presupuesto mensual es de sólo 700 dólares y no de 2.200 dólares.

Todavía hay más cosas que considerar. La cuota mensual del servicio también incluye dos comidas al día, y esto reduce su factura mensual de comestibles en unos 150 dólares. Ahora su coste total al mes en la comunidad de jubilados es de 4.550 dólares.

¿Pero qué pasa con la cuota de entrada? Supongamos que está libre de hipotecas y que su casa le reportaría 200.000 dólares si la vendiera. Esto cubriría la cuota de entrada de 175.000 dólares, y le quedarían 25.000 dólares. Dado que los 25.000 dólares restantes ya no están inmovilizados en su casa, podría ponerlos a trabajar en una cuenta que genere intereses (bajos intereses en el entorno actual) o incluso algo como una renta vitalicia inmediata, que hoy podría generar otros 160 dólares al mes. Ahora su coste mensual sería de 4.390 dólares; sólo un aumento de 390 dólares respecto a su anterior presupuesto mensual de 4.000 dólares.

Estos cálculos suponen que usted es capaz de vivir de forma independiente hoy en día. Sin embargo, la realidad es que el 70% de las personas mayores de 65 años necesitarán algún tipo de ayuda con las actividades de la vida diaria en algún momento de su vida, y pueden llegar a necesitar un nivel de atención mucho mayor. Las comunidades de jubilados, como las descritas anteriormente, suelen estar equipadas para proporcionar cuidados de cualquier nivel, incluyendo vida asistida, cuidados de la memoria, rehabilitación y enfermería especializada. Dependiendo del tipo de contrato, estos servicios pueden incluso ofrecerse con un descuento, lo que podría aumentar aún más el ahorro. Sin embargo, la mayor ventaja puede ser la tranquilidad, que a menudo no tiene precio.

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